- Me llamo Toroldo y lo último que me hubiera imaginado es encontrarme esta conversación aquí.
- Yo me llamo Práxedis y al verte entrar he visto que venías buscando cosas concretas pero el destino te ha deparado una variedad que te ha interesado y por tanto me aprovecharé de tu interés para continuar con mi exposición. Es creencia general que sólo se aprende escuchando, lo que no es cierto, hablar y escribir son maneras de desarrollar la propia intuición y de construir el propio razonamiento.
Y continúo Práxedis "he llegado a la conclusión de que el todo funciona según un principio universal y que sabiéndolo todo se explica. Se trata de que el todo se compone de infinitas vías en movimiento y en división constante expandiéndose en todas direcciones hacia el infinito. No existe ningún fin ni en lo grande ni en lo pequeño ni en nada.
Ni el átomo ni sus componentes son finitos, continúan dividiéndose hacia una pequeñez infinita.
Esto explica toda existencia, que no puedan existir dos cosas iguales, y que la misma cosa no pueda seguir siendo la misma y que su cambio sea constante.
Debido a este mismo principio la libertad es una vía hacia una meta inalcanzable pero que crece y se expande según uno anda el camino y que sus limitaciones son las cadenas que uno mismo se pone o deja que le pongan en su mente.
Puede que todo lo que te he dicho no sea cierto, no importa para nada siempre que me sirva o te pueda servir a ti como punto para perseverar en el camino del conocimiento y de la libertad de pensamiento."
- Dejemos ya esta conversación y pasemos a cosas más serias ¿qué vamos a beber? y dime Toroldo, si pudieses elegir qué escogerías ¿ser activo o pasivo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario