En los tiempos de la Dorian había en la zona de Gomila tres discotecas gay que habrían los 365 días del año: Dorian - dedicada a espectáculos con La Diabólica de presentadora, Mykonos (era el nuevo nombre de La Escafandra) con un gran patio detrás en donde se vendían hamburguesas y perritos en la madrugada y Men's - enfrente de Dorian - la mejor que ha habido en Palma - con tres plantas, baile y folleteo a tope a diario.
Dorian cerró y después derró Men's y Mykonos pasó a llamarse Gigoló, era la discoteca "after" cuando este nombre todavía no existía. Aparecieron Black Cat y Spartacus. Sobre 1991 cerró Spartacus, después Gigoló y el Black Cat abría cada vez menos días y al final sólo viernes y sábados hasta su reciente desaparición.
Posteriormente abrió La Demence en el Complejo Broadway. Se mudó al Polígono y después a la Plaza del Vapor. Es la única que queda y sólo abre los sábados. Sic transit gloria mundi!
Haber sido testigo del devenir del ambiente me ha dado una lección: que los errores del hoy se pagan mañana, antes o después. Y que cuando se reemplaza la ambición por la codicia y la competencia por la envidia el resultado es la catástrofe.
