En el salón había un murmullo desalentador contra la del Mar de Plata ya que ninguna estaba a su favor aunque pedía perdón constantemente. Fue Teterina quien dijo que el arrepentimiento es muy importante y que deberíamos perdonarla. Furiosa salta Movinica de Zeus diciendo que el arrepentimiento sin sangre no es válido. Camella de María, que en su tiempo había alcanzado el nirvana plus, alegó que sólo Buda puede juzgar, que nosotros no somos nadie. Miss Book dijo que en "Crimen y castigo" sí hay justicia.
Mientras las Leidys Girls, entre tanto las otras despotricaban contra la del Mar, se zampaban los montaditos de las 7 bandejas y las 4 botellas de vino, asentían de vez en cuanto para no hacer tan descarada su ausencia.
La "nunca engañada" esbozaba una media sonrisa como si del mismo Buda se tratara. Mientras tanto la del Mar, humillada y avergonzada, no gozaba mirarla y en algún momento pensó en marcharse pero desistió, ya que se lo hubiera hecho, luego si que se hubiera desatado un verdadero ataque, peor que si se hubiese abierto la caja de pandora.
De súbito una tenue voz proveniente de la no engañada interrumpió el murmullo, todas las allí presentes le dirigieron la mirada mientras fijaba sin ojos en los de Trebaluger y con voz solemne dijo: este cariz serio, sublime, sobrio, con matices similares al Tratado de Versalles, está movido por un único motivo.La de Trebaluger, feliz y contenta hasta ahora viendo humillada a la del Mar se turbó, ya que conociendo a la no engañada percibió que le tiraba un dardo envenenado y temió ser descubierta en su verdadera intención, pero las cartas estaban echadas y en tono altivo dijo ¿cuál es ese motivo hija de la gran puta?. La no engañada respondió con otra pregunta, en realidad una afirmación ¿no será por los celos?
La de Trebaluger murió en el acto.
Máximo
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