Herbívoro

Herbívoro

"Que ahora está de moda ser "herbívoro", que quiere decir que ni practicas, ni buscas, ni te interesa el sexo real. En Japón, por lo visto, casi la mitad de la población hasta 34 años es virgen, sólo hace sexo por ordenador. " Del libro y eBook Gomila Viva 2034 de Antroom.

Sobre esta temática va el diálogo que tiene lugar en el apartamentito de casta soltera de Miss Lemon durante la cena equilibrada de proteínas, vitaminas, grasas y carbohidratos que ofrece a Miss Poison, Miss Basu, Miss Chugar, Miss Buk y a Marquesa de Tetrabrik a quien Miss Lemon, modelo de corrección y comedimiento, que siempre pone tratamiento delante del nombre como reflejamos, llama Miss Marquïs.

Miss Poison - Desde hace siglos Eros está envenenado por el sentido de pecaminosidad, tan enraizado y del que nadie se libra de verdad aunque crea lo contrario, y de las muchas y nefastas consecuencias que de ello se derivan una que afecta especialmente a las relaciones es su unión con la manipulación, por ello no es de extrañar que triunfen fórmulas que obvien el encuentro personal.

Miss Marquïs - Creo recordar que pensadores de renombre alabaron la prostitución precisamente por ser un trato claro y directo sin manipulaciones.

Miss Chugar - Otra consecuencia del envenenamiento de Eros es lo mal que se folla, que pienso es debido al sentido de culpabilidad que acompaña al hacer algo que en el fondo se considera malo; sólo en el porno ves el sexo que te gustaría encontrar, por eso, por la muerte de la noche y porque se ha vuelto complicadísimo encontrar tema, hice un voto de casi castidad en el porno, digo casi porque si me sale un plan interesante lo aprovecho, pero sólo si aparece, no lo busco.

Miss Lemon - Yo soy virgen y casta porque no encontré a la persona adecuada para compartir mi vida y nunca se me ocurriría tener relaciones íntimas con cualquiera y menos con desconocidos.

Miss Buk - Tú compartes la creencia generalizada de que la ausencia de sexo no reglado es sinónimo de respetabilidad, aunque debo decirte que la castidad es una forma de sexo extremo, lo mismo que los castigos que se aplicaban o se aplican para aplacar los "malos pensamientos", placeres masoquistas de los que el sujeto no es consciente y por tanto no considera tales. A Eros no se le puede matar pero sí malinterpretar.

Miss Poison - Es interesante la cuestión de los lindes de lo que se considera que es o no sexo. Por ejemplo, una pareja que hace manitas probablemente no lo considera pecaminoso y hasta donde puede llegar la mano, dependiendo de las circunstancias, sin que se considere sexo tiene muchas interpretaciones. El consolador fue inventado como instrumento terapéutico y las respetables casadas que eran penetradas por tal aparato por el médico lo interpretaban como tratamiento.
¿Hasta dónde te podrían tocar púdicamente Miss Lemon?

Aparte de dar la mano hasta ningún sitio por supuesto.

Te sigo preguntando ¿supongo que te dejarías dar un masaje y en este caso podría incluir las nalgas?

Si el masaje me lo diese una mujer sí, un hombre no

Continúa Miss Poison, te dejas pues tocar según la supuesta intención e incluso en este caso hay líneas tabú. La propia existencia del tabú demuestra que, por muy liberado que uno se sienta, es una creencia profunda que Eros y pecaminosidad van unidos, con la represión que ello conlleva.

Miss Marquïs - Ahora se lleva hacer sexo con ropa y sus practicantes no creen estar cruzando líneas rojas. Vamos, que eso no lo ven propiamente sexo.

Miss Chugar - El enamoramiento es una forma también herbívora. Arranca con una atracción y un deseo físico pero su combustible es su no realización, es la dificultad de su logro lo que verdaderamente lo enciende. Una vez conseguido el objeto, conseguida la conquista, el enamoramiento puede simplemente extinguirse o pasar a ser otra cosa aunque no se le cambie el nombre. Lo ideal cuando hay atracción mutua sería que deviniese en afecto y complicidad pero lo que con frecuencia aparece es manipulación, posesividad, celos, miedo a la pérdida y otras paranoias que en casos están ya presentes desde un principio. A todo esto se le pone el bonito nombre de amor.

Miss Basu - ¡Lo que he pasado yo con los amores! Lo peor es cuando no eres correspondido. Bien cierto lo que decías antes de lo difícil que es encontrar un buen polvo.

Miss Chugar - El enamoramiento es una tormenta química que sólo afecta a uno mismo y no depende de que el otro también la tenga o no. Dada su intensidad es fácil que se vea que el objeto que ha servido para producirla no actúe respondiendo a las expectativas, hiera el orgullo o la vanidad, y por tanto también es fácil que el supuesto amor pase a ser animadversión u odio.

Miss Marquïs - ¡Claro que te es difícil encontrar un buen polvo, Miss Basu, con esta maldición que tienes encima y que sólo te deja disfrutar con diámetros exagerados!

Miss Basu - Todos tenemos nuestros gustos, menos tú Tetrabrik, que te lo tragas todo. Padeces bulimia de sexo y de vino. Eres el vivo ejemplo del amor fraterno pues me consta que nunca dijiste no a nadie.

Miss Buk - El cultivar deseos difícilmente realizables o imposibles es un forma inconsciente de autoengaño ya que se fantasea con logros que en realidad no se quieren conseguir ya porque se tema su consecución ya por sentido de culpabilidad solapado. Se cree que se quiere y en realidad no se quiere. Se anhela el anhelar rehuyendo el lograr.

Miss Poison - Todo tiene su función. Quien se entrega a esos autoengaños o busca enamorarse lo hace como mejor opción, quizás un mal menor para evitar un mal mayor. Instintivamente se busca el placer o en su defecto sufrir menos. Todo cuelgue es en el fondo una defensa contra algo que se intuye peor. Que se acierte o no o que se descarten mejores opciones es otra cuestión. He conocido casos de cuelgues de enamoramiento que, sin ningún sentido, han durado hasta el último aliento, quizás como muro de contención frente a pavores como al pavor al vacío o a cuestionarse creencias. Los cuelgues más comunes son los debidos a temores, insensateces y tonterías, aunque a estos cuelgues no se los ve como tales y hasta aparecen revestidos de virtud.

Miss Chugar - ¿Es cierto Marquesa de Tetrabrik que te tuvieron que coser el culo de tan abierto que lo tenías?

Miss Basu - Si es cierto. Estuvo unos días en una clínica privada y le dieron una habitación en el primer piso y que daba a la calle, se pasaba el día en la ventana y hacía subir a todo conocido que pasaba. Su habitación fue un burdel.

¡Qué dices! Me habían cosido y no podía hacer nada.

La boca no te la habían cosido por lo que se. Lo tuyo es demasiado Marquesa, oyes la palabra asno y te pones en trance, aunque pongo la mano en el fuego que se trata sólo de una fantasía.

Jo, jo, jo ¡Cómo eres Miss Basu!

Miss Lemon - ¡Que barbaridad de conversación! Sólo habláis de inmoralidades y para nada de nobles y buenos sentimientos.

Miss Poison - Las moralidades son herramientas para manipular y dominar y si están ahí es porque muchos necesitan creérselas. Nada de malo hay en el afán de dinero y poder sino en que se anhele tenerlos para satisfacer deseos cretinos. Para quien no tiene la cabeza bien puesta triunfar es peor que fracasar.

Miss Buk - La vida en comunidad exige renuncias y aceptar limitaciones pero todo cuanto pase de esto es superfluo y le importa un bledo a las mentes críticas. Quienes no tienen esa lucidez necesitan ser manejados por morales o por el miedo a las consecuencias de sus actos que resulten inaceptables para la convivencia. El lúcido no necesita de estas coerciones y demás extravagancias y pamplinas, sabe estar en su lugar.

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