Yo Blediano

jueves, 15 de octubre de 2020

Cerdito precioso & Estreñimiento y Felicidad & Berenjenas a Beccafico...


Regalo instantáneo: 1 billete firmado en tu Ruta Guay por Santa Catalina con la palabra clave: Glorioso - Lugar: Bar-Restaurante Reina Mora - Sant Magí, 53



Hasta el gorro del zaping y después de no aguantar más a un joven que no deja decir ¡increíble! ¡es increíble! y de una joven a la que todo la sorprende y le produce aspavientos y dar grititos, Liti Püttys aterriza en un teleadivino, verdadero oasis de frescura en todos los sentidos. Muy criticados son estos servicios aunque probablemente llamar a su teléfono resulte el sacamantecas más barato, muchísimo más que, por ejemplo, un viaje milagrero o un finde salvífico, y que a cambio ofrecen, al menos, consuelo y esperanza sin ulteriores comeduras de coco, aunque en verdad es un plato que se debe tomar bien caliente, al igual que muchas otras cosas. A una entregada llamante, el cartomante, mostrándole en todo un excesivo afecto, la llama "querubín". Alguien me dijo una vez, piensa Liti Püttys, que no hay verdadero amor si al tal no se le llama por un apelativo cariñoso; esto vino a cuento de que un conocido era llamado "ratita" por su media y, ampliamente compartida, naranja, aunque más apropiado hubiese sido llamarlo "ratota", pero se dice que el amor, como tantas cosas, es ciego.

Con estos elevados pensamientos, Lityi Püttys se adentra en el reino de Morfeo. Se encuentra en una cocina y delante tiene a una persona de alguna manera vagamente conocida que está cortando tomates. A esta persona le entregan un cerdito y le dan la orden de que lo mate y lo trocee. "Pero si es precioso, no puedo, no puedo matarlo" protesta vehementemente el llamado a ser ocasional matarife al que el cerdito le ha despertado los más amorosos sentimientos. "Mátalo, mátalo" repite la orden. Ya justo en el momento, venciendo las dichas resistencias, en que el cerdito está a punto de abandonar este valle de lágrimas, otra voz dice "no, no, que no lo mate, que se lo lleve a su casa". El feliz en extremo se lleva al cerdito repitiendo "es precioso, es precioso". En la casa y ya durmiendo le despiertan unos tocamientos y entonces ve al cerdito sobre la cama con su hocico sobre sus partes. Con estupor y espanto cree reconocer en la cara del cerdito rasgos de Vujerine, persona conocida por la generosidad de la entrega de su cuerpo al prójimo y por su célebre maquillaje. "No es un cerdito, es un cerdo, el avatar de un sátiro. De por todas partes pueden llegar los ataques a la decencia. Soy persona de hoy y por tanto abomino de la concupiscencia... o por lo menos eso predico". exclama una voz.

Ahí se despierta Liti Püttys y los pensamientos se le arremolinan. "Al cerdito lo salvó su belleza y horror ha producido el entreverle rasgos de fealdad ¡La discrimación de los feos a todo llega! Voy a averiguar que es eso del avatar".

Los Sueños de Liti Püttys en http://bit.ly/antroom


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